lunes, 31 de enero de 2011

UNGÜENTOS MÁGICOS. Rhassoul y Henna.

    La MADRE  TIERRA nos cuida. De hecho, las mejores firmas cosméticas y las empresas más innovadoras, retornan a la ESENCIA de la naturaleza, a la tierra, a los minerales, y a los productos naturales que crecen en ella. Extraen de ella sus mejores cualidades para que lleguen a nosotr@s lo más intactas posible.
    DESDE ANTIGUO la mujer, y el hombre también, ha usado los minerales y vegetales que da la tierra para decorarse, cuidarse y hasta curarse. Esta tendencia de retorno a la naturaleza me parece muy importante, por eso quiero dedicar esta entrada a algunos de los PRODUCTOS DE LA TIERRA que  pasados por el tamiz de la mano del hombre, nos aportan sus cualidades excepcionales.
   Os cuento LAS TIERRAS que yo he usado.
   Empecemos por el RHASSOUL o Ghassoul de Marruecos. Me atrae mucho esta cultura y su estética, así como la India. Ya os enseñé en un post anterior algunos Khol o Kajal que he traído de algún viaje http://naturetbeaute.blogspot.com/2010/10/kohls-viajeros-y-un-polizon.html
   
Foto de visitarmarruecos.com
El RHASSOUL es un tipo de arcilla que procede de las montañas del Atlas en Marruecos. El origen de la palabra es árabe y significa "limpiar". Ha sido usado desde antiguo por las mujeres marroquís y forma parte del patrimonio cultural de la belleza árabe como el Khol, el Argán o la Henna.
El Rhassoul se presenta en LASCAS o en polvo que hay que mezclar con  agua para formar un barro fino que se aplica tanto en la piel del rostro, como en la del resto del cuerpo y también en el cuero cabelludo. Si se quiere enriquecer y hacer más placentera la mezcla se puede usar junto al agua de azahar, o agua de rosas o de romero, o algún aceite esencial que nos agrade. De este modo mejora el aroma y aumentan sus propiedades cosméticas.
   Es especialmente efectivo con las pieles grasas y mixtas porque tiene gran capacidad de absorción por los minerales que la componen. Aunque tengo la piel seca y sensible, lo utilizo una vez al mes en forma de mascarilla para limpiar en profundidad el rostro, lo mezclo con agua de azahar y lo dejo actúar hasta que empiezo a notar que me tira la piel, lo retiro con ayuda de una esponjilla y agua templada. La piel queda limpia de impurezas y ayuda a retirar las células muertas. En el cuerpo lo uso a modo de exfoliante en la ducha, deja la piel suave y limpia. En el cabello todavía no lo he probado. Compré un paquetito de lascas en Marruecos. Mirad que hermosa foto del Rhassoul en  polvo y en lascas (de izquierda a derecha) de tajsultana.com



Y pasamos a otro "ungüento" la HENNA, que sí la he probado en el cabello. Se extráe de las raices machacadas de un arbusto y se usa para teñir el pelo o para decorar con bellísimos dibujos las manos y pies de las mujeres (foto de visitarmarruecos.com). Se puede encontrar en varios formatos: polvo seco o barro preparado. La he usado en polvo seco, se mezcla con agua y se aplica en el pelo como si fuera un tinte. La henna puede ser neutra, es decir que no da color al cabello y también la hay que colorea el cabello (rojizo o negro, también la he visto para cabellos rubios). La aplicación es bastante "farragosa", y hay que tenerla puesta alrededor de unas seis horas..... se hace largo, además como tiene consistencia de barro, pesa en la cabeza. Desde luego, sirve como exfoliante del cuero cabelludo y el pelo queda brillante, con fuerza y suavecito. El resultado es óptimo y el proceso lento, como buen  "ungüento tradicional".
¡Aviso!, la toalla y los "apechusques" para hacer el barro que uséis quedan para el arrastre. La henna se puede encontrar en parafarmacias y herboristerías. La más extendida es la de Radhe Shyam, que además tiene champús y otros productos para el cabello que incorporan la henna en su composición.

Muchas gracias por leer y comentar. Espero que os haya resultado interesante. Aún tengo algunas tierras más de las que quiero hablaros. Mil besos.